Hugo Pratt por Héctor Oesterheld
Sin lugar a dudas, este es un libro único, porque si es común dedicar un libro a la obra de un pintor fallecido, ya no es menos consagrarlo a un artista viviente, y mucho menos todavía a quien acaba de cumplir 28 años y que, para colmo de rareza, no pertenece a ningún grupo de vanguardia, sino que procede de un género que todavía está alcanzando su categoría de arte: la historieta.
Pero un arte con una gran proyección popular, con miles y miles de lectores en todo el mundo.
Hugo Pratt es precisamente un magnifico elemento de prueba para quienes sostenemos que la historieta no es específicamente mediocre, sino que solamente hay historietas buenas y malas, según la calidad y capacidad de quienes la hacen, y que la historieta, cuando se la trata con nobleza de procedimientos, y con verdadera capacidad artística, puede llegar a alturas insospechadas.
Ocurre con la historieta como con el cine. Nadie piensa en rechazarlo como arte porque el 90% de lo que se filma no merezca ni siquiera ser proyectado.
Es más, Hugo Pratt demuestra con su historieta lo que un verdadero artista puede hacer en un género popular. Y señala lo interesante que puede ser para un pintor o dibujante que se pasa esterilizando trasnochadas búsquedas de derroteros artísticos, que en el mejor de los casos lo conducirán a un reconocimiento de un reducido grupo de elegidos. Que podrían encontrar en este género una vasta repercusión de su obra y contribuir con suaporte a una dignificación de la narración en cuadros.
El dia que sean muchos los artistas de la talla de Hugo Pratt que se incorporen a la historieta. esta, sin perder ninguno de los elementos que tan atractiva la hacen, pasara a ser un valioso elemento de formación cultural.
Todo este significado de la obra de Hugo Pratt justificaba ya de por si la dedicación de un libro a su arte.
Pero su capacidad rebasa el género y escapa hacia otros campos en busca de otras posibilidades.
En las páginas de este libro están las muestras: la ilustración de vividos temas de guerra. Las delicadas acuarelas. Los sugestivos “sketch”, los vigorosos estudios de historieta que lo presentan dentro de una gama tan variada que asombra.
Y no puede uno menos que preguntarse, adonde ira este artista tan joven oque realizaciones lo llevara a su madurez.
¿Seguirá en la historieta, a la que puede elevar a alturas insospechadas, o pasara a la ilustración de libros donde tiene todo en la mano para llegar a ser un maestro, o, movido por estímulos imposibles de prever, se pasara al arte, al arte de la elite?
No podemos adivinarlo. Esto es quizás lo más interesante del presente libro: ofrece la imagen de su art en un momento en que se le abren todas las perspectivas. Es un documento que nos permitirá apreciar a la luz de sus próximas realizaciones la evolución futura de Hugo Pratt. Un documento que es, por lo tanto, un verdadero compromiso, porque ofreciéndose así al público, Pratt contrae con el una deuda de superación de nuevas búsquedas.
Como se ve, no exagerábamos al comenzar diciendo que este es un libro único.
Fuente: HUGO PRATT . 1955 – By Enrique Lipszyc Editor . Triton. Buenos Aires
